Despierto está,ya ha sonado su despertador.Se pone en pie mientras se pone de pie descalzo,el suelo está frío y aún no ha amanecido prácticamente,va andando tranquilo hacia el labavo donde laba su cara y sus manos,comienza a deslizarse entre los primeros rayos de Sol mientras entra en la cocina donde desayuna y fumar el primer cigarrillo del día.
Se siente sólo,aún no ha pasado ni un mes desde que se fue y le está costando mucho seguir adelante,siente un vacío en el pecho que no le deja respirar,es como si le faltase algo,lo reflexiona,lo medita y vuelve a la cama donde comienza a llorar,no tiene ganas de salir,no tiene ganas de estar con nadie,sólo siente nostalgia,nostalgia de tiempo mejores donde abundantes eran las sonrisas y los besos y donde el amor se podía respirar en el aire.
Enciende un cigarrillo más y al rato se consume,dura poco y eso lo pone aún más triste,porque se da cuenta que todo en la vida es efímero y que,seguramente,como aquel cigarrillo gastado no se volverá a encender,el amor de su vida por mucho que llore,no volverá.
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¿Te perderías en algún lugar conmigo?
Pues date prisa en decidirlo o búscame,porque quizá si lo decides demasiado tarde ya estaré tan lejos de aquí que la nostalgia ya estará curtiendo mis heridas...
Amélie
Amélie no tenia un hombre en su vida, lo habían intentado pero el resultado nunca había estado a la altura de sus expectativas. En cambio, cultiva el gusto por los pequeños placeres... Hundir la mano en un saco de legumbres, partir el caramelo quemado de la Crema Catalana con la cucharilla y hacer rebotar las piedras en el canal Saint Marthin.
Sigeme, prometo cuidar de tí.
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¡Simplemente precioso!
ResponderEliminarTodos tenemos momentos de bajón, pero justo en esos momentos es cuando tenemos que intentar poner un gran sonrisa y alegrarnos por todo lo que tenemos a pesar de nuestros pequeños problemas...
Un abrazo!!!