domingo, 5 de febrero de 2012

Hundimiento personal.

"Las cosas en la vida suceden por algo". Una frase tremendamente cierta y a la vez, tremendamente triste.... Nunca me había parado a pensar por qué me ha pasado todo en este tiempo y por qué he vivido las cosas que he vivido en un periodo de tiempo tan breve. Nunca se sabe lo que te va a ocurrir, nunca supe que todo lo que nunca quería haber vivido lo he vivido en un tiempo récord.

Los kilómetros, la distancia, el olor a sufrimiento y el echar de menos. Es espantoso, realmente espantoso pensar en todo eso... Ya no sólo por no poder tener todo lo que necesito conmigo, es algo más, es saber que la vida está girando en torno a un mundo que está alejado paralelamente de la realidad en la que siempre viví y nací. Realmente espantoso es ver viejas fotos, recordar y sentir que esos momentos nunca volverán....


Que ya no volveré a ser el chico de ayer. El chico que se perdía en las calles buscando amores en bares mientras descubría el olor a café, la nicotina y las noches de placer. Las largas noches dónde nunca sabía qué me podía suceder. Que nunca más habrá un nosotros, nunca más volveremos a ser ese Septiembre. Que nunca más volveré a oír "Ey, Gavilán". Que ya no hay París, ni clases de Matemáticas absurdas dónde mi cabeza imaginaba un futuro, ni primeros amores y confesiones a altas horas de la madrugada.

Nunca volveré a ser todo lo que fui y realmente tampoco sé qué porcentaje de todo aquello queda hoy en día dentro de mí, no sé si habré perdido todo, parte o nada. Sólo sé, sé que hoy me encantaría viajar hacia esos años, esos maravillosos años dónde todo era realmente perfecto. Dónde estabais mis cuatro ángeles conmigo, dónde la danza envolvía mi vida, dónde estudiar veinte folios era una odisea, dónde éramos todos juntos, dónde el amor se rozaba en cada poro de mi piel y quería como si mañana no fuese a salir el Sol, dónde estabas tú y no me hacía falta echarte de menos. Dónde descubría el mundo, mi pequeño mundo y no conocía la palabra desamor, sólo creía en el amor y en lo maravilloso que es enamorarse. Dónde jugaba a crecer y la Luna siempre me guiñaba el ojo y se disponía a darme dos cervezas y un pitillo más.

Ante todo, me gustaría volver a sentir que no necesito echar de menos nada, porque todo está bien. Esa sensación la anhelo en cada centímetro de mi cuerpo, esa sensación de estar completamente en paz conmigo mismo, de saber que todo está bien y que aunque haya algunas zancadillas, la vida al día siguiente me sonreirá.

Y no esta puta sensación, esta puta sensación de que por mucho que lo intente, nunca volveré a sentir los rayos de Sol con tanta intensidad como en aquellos años...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nunca hay suficiente tiempo, nunca es suficiente...

¿Te perderías en algún lugar conmigo?

¿Te perderías en algún lugar conmigo?
Pues date prisa en decidirlo o búscame,porque quizá si lo decides demasiado tarde ya estaré tan lejos de aquí que la nostalgia ya estará curtiendo mis heridas...

Amélie

Amélie
Amélie no tenia un hombre en su vida, lo habían intentado pero el resultado nunca había estado a la altura de sus expectativas. En cambio, cultiva el gusto por los pequeños placeres... Hundir la mano en un saco de legumbres, partir el caramelo quemado de la Crema Catalana con la cucharilla y hacer rebotar las piedras en el canal Saint Marthin.

"je vais faire l'amour avec toi"...

Más soñadores.