- Empecé a quererte exactamente cuando llamaste para decir que me dejabas. De hecho, fue en ese preciso momento cuando olvidé el amor que sentía antes, me olvidé de la ternura,del sexo, de tu lengua...
- Me di cuenta de que lo que había sentido antes no era más que el simple reflejo de lo que es el amor. Descubrí... que no te había querido nunca.
- De repente pensé en aquella tortura que practicaban en Francia. ¿Sabes qué hacían? Ataban las extremidades de una persona a cuatro caballos y los azuzaban en direcciones diferentes. Pues así es como me sentí. Así es como me siento. Ahora ya sé lo que es amar.
jueves, 2 de diciembre de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Nunca hay suficiente tiempo, nunca es suficiente...
Y conocer el amor cuando ya no tienes ninguna oportunidad vv'
ResponderEliminarmme encanta tu blog:)