Búscame en cada rincón. Búscame en cualquier lugar de tu habitación, en los momentos más vacíos. Busca lo más ensencial, busca lo más sentido. Voy a estar en ese sitio dónde uno consigue sentír calor en el Polo Norte y dónde consigue respirar una ráfaga de aire fresco en el desierto del Sáhara. Estaré ahí.
No hace falta que me busques en un telescopio, no seré una estrella fugaz. Tampoco seré nada misterioso, demasiado difícil de explicar. Te diré lo que seré si tú confías en que estaré contigo. Seré uno de tus sentidos, el más humano y a la vez el más aburrido : seré tu gusto cuando besando encuentres en otras bocas lo que yo no he sido. No te enfades si te miento o si no consigues buscarme, no me enfadaré, eso es que el tiempo ha hecho su parte, porque al fín y al cabo ni este fragmento ni nada de lo que vivimos ha sido cumplido.
martes, 30 de agosto de 2011
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Nunca hay suficiente tiempo, nunca es suficiente...
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